Canibal Pop

 

Cultores de un rock-pop medio alternativo y bastante satírico, los muchachos de Canibal Pop armaron la banda en Atlántida, Canelones, en 2012. Cuatro años después editaron su disco debut, Emergencia, en el que se encuentran temas como “El último Ramón”, que mezcla una letra como “y por la Ruta Destroy, este es el último Ramón, / otra vez quebrado / viendo pasar la maratón” con una introducción instrumental que cita nota por nota, pero de forma sucia, la legendaria melodía del tema principal de la película británica Carrozas de fuego (1981), compuesta por Vangelis. “Si puedo comer iré a un almacén / por los olímpicos y un Nevada diez / Ah, me olvidé (la puta madre), / dejarle un tacho de agua al dragón”, dice la estrofa final, ilustrando una mezcla bizarra de eventos.

Su segundo disco, Acción II: Kamikazes, siguen por el camino humorístico y además se animaron a recorrer otros estilos. Por otro lado, en cuanto a sonido y producción, el álbum suena mucho mejor. Aníbal Capoano, vocalista, tecladista y compositor del grupo, cuenta que el primer disco fue grabado en forma casera, en un home studio, y que las canciones habían partido de un germen más solista. En cambio, para el nuevo álbum, que el cantante define como “más rítmico” y “más dinámico”, los temas nacieron de la banda, en los ensayos, y para el sonido contaron con la producción de Sebastián Peralta, Gastón Ackermann y Steven Lema. “La temática de las canciones empezaron a jugar con el ritmo, entonces, las influencias de cada uno de los músicos se fueron metiendo cada vez más”, dice Capoano.

 
Cuatro Cuarenta