El pasado 22 de febrero, Live Era se convirtió en el epicentro de una noche cargada de potencia y brutalidad sonora con un cartel de lujo organizado por Senda Negra. Cinco bandas hicieron temblar el recinto, dejando en claro que la escena del metal sigue más viva que nunca.
Escarnio fue el encargado de abrir la jornada, calentando motores con su sonido crudo y agresivo. A pesar de ser los primeros en escena, lograron encender la chispa entre los asistentes, que poco a poco comenzaron a llenar el lugar. Sus riffs afilados y guturales viscerales marcaron el tono de lo que sería una noche inolvidable.